El acoso al gobierno de Murcia desemboca en violencia ante la pasividad del gobierno socialista
La condena debe ser firme, la intolerable agresión perpetrada contra el Consejero de Cultura y Turismo del Gobierno de la Región de Murcia, Pedro Alberto Cruz Sánchez.
“Es el último y más grave episodio de una campaña de acoso contra el Gobierno de Murcia, que se ha venido desarrollando en los últimos días ante la pasividad del Ministerio del Interior de Rubalcaba”.
Hay que preguntarles a los dirigentes del PSOE, que ahora condenan la agresión, que se pregunten “qué consecuencias está teniendo su comportamiento virulento” contra el gobierno murciano.
El Presidente ha sufrido ataques con huevos en su casa y el acoso a su hija.
Otros dos miembros del gobierno sufrieron un intento de agresión.
El presidente de Murcia, Ramón Luis Varcárcel, exige la dimisión del delegado del gobierno socialista al “permitir la espiral de violencia contra el PP murciano”.
El Delegado del Gobierno todavía no ha actuado contra la manifestación ilegal el pasado 22 de diciembre.
La repugnante agresión supone un atentado político contra un representante de nuestro sistema democrático
Hoy, más que nunca, todos somos Pedro Alberto
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